Por Ellie Carter

Seguro que más de una vez alguien de tu círculo ha estado hasta las trancas de su nueva pareja y tú has pensado «¿Pero qué le ve a esta persona?». En una situación así, ¿le dices a tu amigx lo que opinas porque la honestidad es un valor fundamental en las relaciones de amistad? ¿O prefieres mantenerte al margen porque, claro, «quién soy yo para decir nada»?

Ante esta cuestión, no hay una respuesta unívoca y todas las opciones tienen sus cosas buenas y sus cosas malas. Para aclarar mis dudas, he recurrido a Sheva Assar, psicóloga clínica, cuyos consejos han arrojado más luz sobre el tema.

Antes de hablar de lo que se debe y no se debe hacer en estos casos, esta profesional de la salud mental propone algunas preguntas como punto de partida.

¿Qué es para ti algo «malo»?

No es lo mismo una relación «mala» que una abusiva o tóxica. Es importante tener claro qué te lleva a creer que no es sana y plantearte si otra gente compartiría tu punto de vista.

¿Basas tu opinión en tus propias vivencias?

¿Qué es lo que más te empuja a tener la sensación de que la pareja de tu amigx no le conviene? ¿Tiene que ver con cosas que has visto de su relación o tu opinión se ve influida por otros factores como tu currículum amoroso, tus gustos, tus manías o tu situación sentimental actual?

¿Cómo es vuestra amistad?

¿Cuenta con unos cimientos sólidos como para que tú puedas decir abiertamente lo que opinas sobre la relación y la otra persona se muestre receptiva y confíe en tu criterio? ¿O se trata de una persona que no conoces tan a fondo y que podría considerar tu actitud un tanto invasiva? ¿Qué pasa si dices las cosas o si te las callas?

¿Tus comentarios ayudarían a esa persona?

A veces, pensamos que lo que nos ayudaría con un problema también serviría a otras personas en la misma situación; sin embargo, conviene que te pares a pensar en si tus palabras harán que tu amigx esté mejor a la larga.

Cuándo SÍ deberías decirle a tu amigx que su pareja no le hace bien

Sin lugar a dudas, si su pareja representa una amenaza para su seguridad, debes hablar con la persona involucrada: muéstrale tu apoyo y no la juzgues en ningún momento. En palabras de la psicóloga Sheva Assar: «Si te preocupa su integridad física y mental, plantéate preguntar a alguien más cómo puedes abordar el tema en función de lo que sepas de la persona, de su relación y de su situación actual. Expresa tus preocupaciones sin poner etiquetas y de manera objetiva para que a tu amigx le quede claro qué es lo que te inquieta. No te centres en tus impresiones: debes poner el foco en las dinámicas de la pareja. Si lo ves oportuno, puedes animarle a solicitar ayuda psicológica profesional».

Si tú y tu amigx os decís todo a la cara sin problema, no hay nada que temer. A veces, las amistades más cercanas no se tambalean ni un segundo pese a las conversaciones incómodas y la opinión de esa persona a la que tanto quieres es vital hasta para las cosas más mundanas. Lo que más me gusta de mi entorno más cercano es que la honestidad es la base que sustenta nuestra relación: no me corto a la hora de opinar sobre un modelito hortera, ni tampoco me lo pienso dos veces si tengo que decir lo que pienso sobre alguna pareja. Además, creo que en ocasiones conozco a mis amigxs mejor que ellxs mismxs: cuando empiezas con alguien, es muy fácil verlo todo color de rosa e ignorar las señales de alerta que otras personas cazan al vuelo. Sé de varias amistades que en los primeros compases de sus relaciones han pasado por alto cosas que después les han amargado la vida… ¡Si les hubiese dicho lo que pensaba en su momento, quizás habría ayudado a la larga!

Cuándo NO deberías decirle a tu amigx que su pareja no le hace bien

En caso de que no sepas distinguir entre si te cae mal o si es una mala influencia, déjalo estar: existe una línea muy difusa entre ambas situaciones y puede que basemos nuestra opinión en cómo nos llevamos con la persona. No siempre acabaremos conectando con las parejas de nuestrxs amigxs, y no pasa nada: debes pararte a reflexionar y sincerarte sobre las razones y los hechos que te llevan a pensar que son personas tóxicas. Al fin y al cabo, tú no estás saliendo con ellas.

Si tu opinión no aporta nada: un pilar básico de la amistad es mostrar tu apoyo independientemente de la situación por la que esté pasando tu amigx. Y ese es tu papel: en lugar de tirarte el día dando lecciones de vida, consejos o diciéndole que corte con su pareja, debes aceptar que toda relación tiene sus más y sus menos. Al final, que algo funcione o se termine depende de las personas implicadas. Las discusiones no son algo que deban alarmarnos y, además, tú solo escucharás una versión de los hechos: no es de extrañar que acabes pensando que tu amigx es siempre el personaje bueno de la película. Por otra parte, debes tener en cuenta que no eres un consultorio psicológico ni ofreces terapia de pareja: a veces, solo podemos limitarnos a escuchar y demostrar que estamos ahí.

Como hemos visto, es necesario tener en cuenta muchos factores antes de decirle a alguien que su pareja no le hace bien y, además, cada situación es un mundo. Por lo tanto, dependiendo del grado de cercanía con tu amigx y de cómo sea su relación amorosa, será mejor dar tu opinión o guardártela para ti.

La doctora Sheva nos dejó algunas pautas finales a la hora de considerar si decirle o no a alguien que su pareja «no le hace bien»:

• Modera tus expectativas: aunque tengáis la conversación más intensa del siglo, eso no va a solucionar sus problemas de pareja. Si su seguridad no está en peligro y el tiempo lo permite, abre el diálogo, muestra un interés real por sus experiencias y recuerda que las cosas pueden cambiar. Al fin y al cabo, lo más importante es mostrar siempre tu apoyo a esa persona que tanto aprecias.

• Cuando habléis, pregunta a tu amigx de qué forma puedes ayudarle. Independientemente de su respuesta, no está de más dejar claro que estarás a su lado siempre que te necesite.

¿Qué piensas? ¿Le dirías a tu amigx que su pareja no le hace bien?