A veces, los mensajes en una app de citas no reciben respuesta. Esto ocurre. Puede deberse a una multitud de razones: a quien iban dirigidos se le ha caído el teléfono por el inodoro, se ha perdido en el desierto y no tiene cobertura... la lista es interminable. Sin embargo, una nueva investigación de Badoo ha descubierto otra razón muy plausible para un intercambio poco electrizante: un masivo 68% de las personas de este país desconecta de los mensajes mal redactados.

Resulta que los mensajes atropellados y chapuceros afectan considerablemente a las posibilidades que tiene la persona que está buscando una cita de conseguirla. Una cuarta parte de quienes buscan pareja activamente cree que el primer mensaje de una potencial cita es lo que más les permite conocer su personalidad y sus valores (27%), sorprendentemente, mucho más que las fotos (19%) o la biografía de la app (18%). Un tercio (31%) cree que si una cita no tiene tiempo de responder adecuadamente, tampoco lo tendrá para una relación. Además, mucha gente soltera cree que los errores aislados están bien, pero que los que se repiten desaniman (44%).

Así que, dado que la ortografía y la gramática desempeñan un papel tan importante a la hora de conseguir un match, ¿cómo puedes asegurarte de evitar que tus mensajes se pierdan por el camino? Badoo ha colaborado con la popular cómica y presentadora de radio y televisión, Eva Soriano, para crear una lista de consejos que ayuden a las personas a pasar de la A (de app) a la C (de cita).

1. La importancia de los acentos

Todos sabemos que los acentos o tildes son de gran importancia, ya que estos nos permiten ver y pronunciar con mejor claridad las palabras y también contextualizar las situaciones que queremos describir. ¡Y eso es de gran importancia en el mundo de las citas! Por ejemplo, no es lo mismo decir “te gusto” que “te gustó”. En un “te gusto” puede haber cita y beso, mientras que en un “te gustó” ya no hay cita ni beso que valga.

El acento en castellano sirve para distinguir significados, es decir, tiene un valor diferenciador. De ahí la importancia de acentuar bien las palabras como en el ejemplo que hemos compartido porque, si no prestamos atención, nos podemos meter en un buen lío…

2. La hache es muda, pero no invisible

Casi todas las letras del español tienen sonido, menos una… ¡la hache! Podemos pensar ¿“Y… si no se pronuncia, por qué tengo que escribirla”?. Te vamos a dar tres razones por las que nunca debes olvidarte de la valiosa hache:

1) Como dice nuestra querida Eva Soriano, no es lo mismo “¡Ay, qué guapa estás!” que “Ahí hay una chica guapa”.

2) No es lo mismo decir “¡hola!” que “ola”, porque con “hola” saludamos, pero con una “ola” nos vamos a hacer surf.

3) No es lo mismo “echo” que “hecho”. “He hecho una tortilla de patatas para mi crush” dirías si has preparado la mejor comida del mundo para tu cita. “Echo de menos a mi crush” dirías si hace mucho que no os veis. Esperamos que no sea ese el caso.

Así que recuerda… La hache es muda, pero no podemos olvidarla nunca.

3. La riqueza de la coma

La coma es uno de los signos de puntuación más importantes. Su función es indicar en el enunciado pausas breves. Y, aunque sea una pausa breve y corta, es una pausa de muchísima importancia. Por ejemplo, no es lo mismo decirle a tu crush “no, quiero verte” que “no quiero verte”. En el primer caso expresamos nuestras ganas de ver a la persona que nos gusta, en el segundo… Bueno, todo lo contrario. Dicen que las comas son tan importantes que incluso pueden crear héroes. ¿O acaso es lo mismo “solo eso, él lo resuelve” que “eso, solo él lo resuelve”?

Puedes ver el vídeo completo con Eva Soriano a continuación.