Escrito por Rica Pahlke

¿Estás hasta el gorro de los estúpidos comentarios humillando a la gente soltera y de que te acusen de excesiva rigurosidad en tu búsqueda de pareja? He aquí por qué no deberías hacerles ni caso y, en su lugar, celebrar tu nivel de exigencia.

Por favor, déjame en paz con mi soltería

Me encanta estar soltera. Podría escribir toda una lista de cosas que me chiflan. Pero también hay una cosa que me molesta mucho. ¿Qué es, te preguntarás? Aunque en la sociedad actual no es precisamente raro no tener una relación, ni estar casada, ni planear tener hijos con veintitantos años, la soltería sigue siendo un estado temporal en la mente de mucha gente. Un estado que hay que cambiar, preferiblemente cuanto antes. "¿Sigues sin pareja? No te preocupes, ya encontrarás a la persona adecuada". "¿Cómo puedes estar aún sin nadie? Con lo guapa que eres". La cuestión es: no estoy soltera porque nadie me quiera, sino porque yo no quiero a nadie. ¿Te lo has planteado alguna vez?

"Bueno, tal vez eres demasiado exigente y tienes demasiadas expectativas".

Cuando escucho esta acusación (ya sea de amistades que ven las cosas de otra manera o de padres y abuelos que piensan que todo el mundo necesita su pareja perfecta) me dan ganas de gritar a todo pulmón. No porque quiera llevar la contraria, sino porque el hecho de ser exigente con las citas y tener ciertas demandas no es algo negativo a mi parecer.

No necesitamos encontrar nuestra “media naranja”

Al contrario, creo que es muy positivo mostrar cierta rigurosidad. No necesito tener una relación con nadie para no sentirme en soledad. Y desde luego no soy una mitad que necesite a otra persona para estar completa; estoy completa y feliz con mi persona. Si me involucro con alguien, es sólo si esa persona me hace aún más feliz de lo que ya soy. Si no es así, prefiero prescindir de ella. Esta actitud no significa que mi nivel de exigencia sea demasiado alto, sino que demuestra que sé lo que quiero (o al menos lo que no quiero). Entonces, ¿por qué debería conformarme con menos? Sí, soy exigente. Y soy exigente con gran convicción.

Precisamente por eso no quiero seguir escuchando que yo soy el problema. No hay ningún problema. Lo único cuestionable aquí es que la mayoría de la gente piensa que la única vida "normal" implica buscar pareja, casarse, tener hijos y estar en una relación monógama para siempre. Pero lo cierto es que los tiempos han cambiado. Hoy en día hay muchas formas de amor y todas deben ser aceptadas y celebradas. Lo mismo ocurre con la soltería. Si alguien no tiene pareja, no siempre significa que esté buscando de forma desesperada cambiar ese estado. También hay personas que eligen conscientemente este camino, no porque sean demasiado exigentes y nadie sea lo suficientemente bueno para ellas, sino porque son felices sin pareja. Y, sinceramente, eso es genial. Así que aquí tienes un pequeño recordatorio de...

Por qué es bueno ser exigente con las citas  

1. Demuestra que eres feliz por tu cuenta

Elegir sabiamente con quién te comprometes en una relación seria (y en caso de duda, preferir permanecer en la soltería) demuestra que eres autosuficiente y que no necesitas a otra persona para alcanzar la felicidad. Y ésa es una de las cosas más importantes de todas: al fin y al cabo, tu compromiso contigo es para toda la vida. Si eres capaz de ser feliz por tu cuenta, ése es un valioso atributo del que deberías enorgullecerte. 

2. Sabes lo que quieres

Tener normas a la hora de buscar pareja es la mejor prueba de que te conoces bien. Sabes lo que quieres y lo que no quieres en tu vida. Ambas cosas son increíblemente importantes y una base perfecta para un día (si tienes este objetivo) construir una relación que funcione a largo plazo, que te haga feliz y en la que puedas ser realmente como tú eres. 

3. Sabes lo que vales

No involucrarse con cualquier Alex, Dani o Marce a nivel emocional es, sobre todo, una decisión saludable para ti. Demuestra que conoces tu valor y lo que te conviene, y por eso mismo, significa que no te conformas con menos. Mantenerte fiel a tus estándares y, por tanto, a tu persona, es algo a lo que nunca deberías renunciar.

El amor propio debe ser siempre lo primero

Defiendo plenamente que cada individuo debería estar sin pareja durante un largo periodo de tiempo, porque sólo aquellas personas que son felices consigo mismas pueden serlo también en una relación. Querernos y disfrutar de nuestra propia compañía es la base de una pareja sana. No podemos esperar que otra persona nos acepte tal y como somos si nosotras y nosotros mismos no somos capaces de hacerlo. Por esta razón, creo que la soltería no sólo es algo saludable, sino mucho más que eso: es importante para nuestro desarrollo personal. ¿Quiénes somos cuando nadie nos mira? ¿Y quiénes queremos ser? ¿Qué camino queremos tomar? ¿Cuál es nuestra meta? La mejor forma de averiguarlo es estando a solas y teniendo la oportunidad de desarrollarnos independientemente de otra persona.

Una relación no debería tener el propósito de completarnos y ningún otro ser humano debería ser el único responsable de nuestra felicidad. La relación debe hacer aún más felices a dos personas que ya lo son. Así que estar en pareja no es todo el pastel, es sólo la guinda.

Ser exigente y dar gracias por ello

Por último, no debemos olvidar que es un verdadero privilegio poder elegir. No todo el mundo tiene la oportunidad en su vida de autorrealizarse, ser autosuficiente e independiente. Si tienes libertad de elección a la hora de encontrar pareja, es un gran regalo. Y si puedes decidir conscientemente en contra de una relación porque no la necesitas en tu vida y no la quieres, también puedes considerarte una persona muy afortunada.

Rica Pahlke es la editora online de todos los temas relacionados con las citas, el amor y el sexo en Cosmopolitan Alemania.