Todo lo que necesitas saber sobre el Síndrome de Confusión de Intenciones

Escrito por Nick Levine

Algunas primeras citas se quedan en nada porque no hay atracción mutua. A menudo no es culpa de nadie: la química sexual es voluble y fugaz y, sinceramente, eso forma parte de la diversión. Sin embargo, me gustaría sugerir humildemente que, a veces, la culpa es de la otra persona. Si se va a pasar dos horas despotricando sobre lo mucho que odia ir de vacaciones con su familia, no puede pretender que el corazón te de saltos de alegría. Esto me pasó hace unos meses y me costó todo el autocontrol del mundo no decir: "Mira, tienes 27 años, dile a tu madre que no quieres pasar tres días en Londres con ella". Al final de la cita, preferiría haber estado en Londres con su madre que con él en aquel bar de Madrid. Ya ves tú, qué ironía.

De todos modos, otras primeras citas son decepcionantes porque no estáis en la misma onda. Si estás buscando una aventura de invierno sin compromisos y la otra persona está buscando en Google "catering para bodas" después de la segunda copa, afrontémoslo: no hay nada que hacer. Teniendo esto en cuenta, aquí te dejo cinco maneras de asegurarte de que la incompatibilidad de vuestras intenciones no se traduzca en un desastre de cita. Al fin y al cabo, no querrás caer en el SCI (Síndrome de Confusión de Intenciones), una nueva afección que parece estar aquejando a quienes han tenido demasiadas citas con personas que estaban buscando cosas muy diferentes de aquellos encuentros o relaciones.


1. Comunica

Lo sé, lo sé. La pregunta "¿Qué te trae por aquí?" es una de las más incómodas que se pueden hacer en una aplicación de citas. Es tan directa y carente de sutileza, que cualquier ilusión de que sólo estás aquí para tener una conversación agradable se desvanece inmediatamente. Pero... tienes que hacerla. Si sólo está buscando a alguien con quien ir a jugar en el barro -sí, este tipo existe; lo sé porque he coincidido con él- es mejor averiguarlo cuanto antes. Así nadie acaba perdiendo su precioso tiempo.

Ah, y si también buscas a alguien con quien encontrar tesoros entre el barro, lo encontrarás en Bustarviejo. Lleva un bigote estilo años 70 y una preciosa chaqueta vintage en su foto de perfil.

2. Sé flexible

Esto no significa que intentes autoengañarte, pero sí que te preguntes si estás en disposición de hacer concesiones. Si lo que buscas es casarte, tener criaturas y una casa con un cuarto para la colada (a decir verdad, ¿quién no quiere esconder la secadora fuera del alcance de sus oídos?) no tiene sentido fingir que estás aquí para encuentros esporádicos. Pero si coincides con alguien genial que quiere tomarse las cosas con calma, ¿podrías probar con algo más informal? No hay nada malo en contemplar al menos un ligero cambio de planes por la persona adecuada.

3. Dale tiempo al tiempo

A veces las intenciones de las personas evolucionan con el tiempo. Puede que pienses que estás totalmente en contra de una relación abierta, pero que aceptes la sugerencia después de escuchar lo mucho que un amigo está disfrutando de la suya. Por supuesto, a veces las intenciones de las personas no evolucionan en absoluto y, en todo caso, se vuelven aún más firmes. Francamente, mientras escribo este artículo, cada vez me gusta más la idea de un cuarto aparte para la colada. No me juzgues: mi secadora es vieja y suena como un helicóptero despegando... En cualquier caso, la clave es mantener la mente abierta. Si crees que existe la posibilidad de que vuestras intenciones coincidan con el tiempo, no descartes a esa persona de inmediato. Sigue enviándole mensajes y a ver qué pasa.

4. Sigue una táctica

Esta es una cuestión delicada porque, cuando se trata de citas, la mayoría de las personas nos guiamos por nuestro corazón y no por nuestra cabeza. Y con razón: Adele nunca escribió una canción sobre tener la cabeza rota, ¿verdad? Pero a veces, puede valer la pena dar un paso atrás y ver si puedes sacar lo mejor de la situación. Si acabas de coincidir con alguien que te gusta mucho, pero te das cuenta de que tus intenciones son completamente distintas de las suyas, puede ser divertido pensar "¡al diablo!" y tener una pequeña aventura de todos modos. Hay dos reglas básicas en esta tesitura. La primera es que debes sincerarte por completo sobre lo que estás haciendo, para no dar falsas esperanzas a nadie. Y dos, establece de antemano un punto final para no encariñarte demasiado.

5. Dile a la gente lo que estás buscando en Badoo

¡Esto es muy fácil! Todas las personas en Badoo tendrán que elegir una de las tres opciones: "quedar y ver qué surge", "busco una relación" o quiero "hablar y conocer a gente nueva". Sólo después de confirmar cuáles son tus intenciones, podrán ponerse a trabajar en serio para buscarte matches. Se trata de una función sencilla que debería ayudar a descartar algunas de las intenciones más evidentes: una persona que quiere "hablar y conocer a gente", por ejemplo, probablemente no querrá cenar con tus padres de aquí a Navidad. Y como puedes cambiar tu elección en cualquier momento, también es superflexible.


Mira el vídeo de Badoo sobre el Síndrome de Confusión de Intenciones a continuación:

https://www.youtube.com/watch?v=5OojV24bLBE